Las ventajas de la energía térmica son tantas que cada vez vemos más paneles solares en viviendas y oficinas. A través de la energía térmica solar, también llamada termosolar, se aprovecha una fuente de energía renovable, la solar, mediante el uso de colectores o  placas solares. Con estos paneles o colectores, se consigue captar la energía térmica del sol para utilizarla de múltiples formas como, por ejemplo:

• ACS (Agua Caliente Sanitaria)

• Calefacción

• Refrigeración

Es importante no confundir la energía térmica solar de la fotovoltaica, a pesar de ser ambas energías renovables, producen la energía de forma diferente. La energía térmica solar aprovecha el calor del sol y la fotovoltaica transforma la radiación del sol en energía.

¿CLAVES DE UNA INSTALACIÓN SOLAR TÉRMICA?

• Absorbe el calor del sol y lo transforma en energía térmica.

• Acumula la energía térmica en un depósito para su posterior utilización.

• Distribuye la energía térmica para trasladar agua caliente a zonas frías que queramos calentar.

• Cuentan con sistemas convencionales de apoyo energético para cubrir aquellos momentos en los que no hay radiación solar o se ha hecho un consumo mayor del esperado.

VENTAJAS DE LE ENERGÍA TÉRMICA SOLAR

Existen importantes ventajas de la energía térmica solar, no solo ventajas medioambientales sino también económicas. A continuación, te explicamos las principales ventajas de una instalación de energía térmica solar.

La ventaja más evidente radica en su impacto medioambiental ya que la energía térmica solar, al tratarse de una energía 100% inagotable y renovable, no emite sustancias tóxicas ni contaminantes lo que contribuye a reducir las emisiones de efecto invernadero y el uso de combustibles fósiles. Es, sin duda, una excelente opción para combatir el cambio climático.

El ahorro que supone frente a un sistema convencional también es un gran aliciente a la hora de elegir una instalación de energía térmica solar. Hay que destacar que estos sistemas tienen un alto rendimiento en cuanto a producción de ACS (agua caliente sanitaria) pueden llegar a cubrir hasta el 80% de las necesidades del hogar (según la zona de España). En cualquier caso, su impacto positivo sobre las facturas de luz y gas es constatable desde el principio ya que reduce sobremanera la dependencia y necesidad de energías no renovables.

También podemos hablar de ahorro en cuanto a mantenimiento se refiere, ya que no son sistemas que requieran de un mantenimiento excesivo, generalmente con una revisión anual es suficiente.

¿CUÁLES SON LAS DESVENTAJAS?

A priori podemos pensar que el alto coste de su instalación puede ser una desventaja, pero es fundamental tener en cuenta que el plazo de recuperación de la inversión no es muy largo por dos motivos: por un lado, no consumes combustibles fósiles lo que produce un ahorro en tus facturas; por otro lado, existen subvenciones a fondo perdido para la instalación de sistemas que empleen energías térmicas solares o un sistema solar termosifón lo que consigue que el plazo de recuperación sea de cinco años aproximadamente. Otro dato a tener en cuenta es la durabilidad de estos equipos que se estima en 20 años.

Por tanto, la única desventaja que podemos mencionar es la intermitencia del sol que podría provocar desabastecimiento en ciertos momentos y la ubicación geográfica de la vivienda u oficina con relación a su orientación y exposición sol. Sin embargo, este inconveniente tiene fácil solución ya que, como hemos comentado antes, los sistemas de energía térmica solar incluyen un sistema de apoyo convencional para solucionar esta situación puntual.