Regulación de Envases y Residuos de Envases: ¿Qué hay de nuevo?
En la era moderna, casi todos los productos que compramos vienen empaquetados.
La importancia de regular eficaz y sosteniblemente la producción y eliminación de envases es crucial no solo para reducir los impactos ambientales, sino también para impulsar a las empresas hacia prácticas más sostenibles.
En 2025, la Unión Europea está poniendo un énfasis aún mayor en la circularidad de los envases, promoviendo innovaciones y prácticas que pueden reducir significativamente los residuos.
Veamos las últimas novedades en la regulación de envases y residuos de envases y lo que implican para empresas y consumidores.
¿Qué son los envases y los residuos de envases?
Los envases son materiales utilizados para proteger y transportar productos, que pueden ser de plástico, cartón, vidrio o metal. Estos materiales facilitan el transporte seguro de bienes y ayudan a su promoción.
Los residuos de envases, por otro lado, son los materiales desechados después de que los productos han sido utilizados. Esto incluye cajas, botellas y envoltorios.
La gestión eficaz de estos residuos es esencial para reducir el impacto ambiental, promoviendo el uso de materiales reciclables y prácticas de reciclaje, así como la adopción de envases reutilizables o compostables.
Estas estrategias ayudan a minimizar los residuos y apoyan la economía circular, contribuyendo a un entorno más sostenible.
Regulaciones de Residuos de Envases 2024 y las principales novedades para 2025
El 2025 marca un año significativo en términos de regulaciones europeas sobre envases y residuos de envases, con la adopción de normativas que buscan intensificar los esfuerzos hacia un 90 % de sostenibilidad para 2029.
Estas regulaciones están diseñadas para abordar los desafíos ambientales desde la raíz, promoviendo el uso de materiales reciclables y la reducción de residuos en todas las etapas del ciclo de vida del producto.
La Unión Europea ha intensificado sus esfuerzos para transformar la industria del embalaje con el objetivo de hacerla completamente circular.
La normativa de 2025 introduce requisitos estrictos y nuevas responsabilidades para productores, distribuidores y consumidores:
- Objetivos de recogida selectiva: Para 2029, los Estados miembros deben garantizar la recogida separada del 90 % de las botellas de plástico de un solo uso y los envases metálicos de bebidas.
- Sistemas de depósito: Para facilitar el cumplimiento de estos objetivos, los Estados miembros deben establecer sistemas de retorno de depósitos para botellas de plástico y envases metálicos.
- Cláusula de exención: Los países que alcancen una tasa de recogida separada superior al 80 % para 2026 podrán quedar exentos de la obligación de introducir sistemas de depósito, siempre que presenten un plan eficaz para alcanzar el 90 %.
- Objetivos de reducción de envases: La regulación establece una reducción progresiva de los envases:
- 5 % de reducción para 2030
- 10 % para 2035
- 15 % para 2040
- Enfoque en los envases de plástico: Se presta especial atención a la reducción del embalaje de plástico para disminuir su impacto ambiental.
- Flexibilidad operativa: La regulación ofrece a los Estados miembros flexibilidad en la elección de medidas para alcanzar los objetivos, equilibrando el uso de envases reutilizables y reciclables de un solo uso.
Implicaciones para las empresas y estrategias de adaptación
Las nuevas regulaciones sobre residuos de envases no solo afectan a los productores, sino también a los consumidores. Los consumidores verán un aumento en los envases sostenibles en las tiendas y serán incentivados a participar activamente en el ciclo de reciclaje.
Las empresas, por su parte, deben adaptarse a un entorno regulatorio cambiante, lo que implica varias estrategias proactivas:
- Innovación e investigación: Invertir en tecnologías innovadoras y materiales alternativos de embalaje que cumplan con los nuevos estándares de sostenibilidad.
- Alianzas y colaboraciones: Trabajar con proveedores de materiales reciclados y entidades de gestión de residuos para optimizar la producción y los procesos de reciclaje.
- Educación y comunicación: Concienciar a los consumidores sobre la importancia del reciclaje de envases y cómo su comportamiento puede influir en el impacto ambiental.
‘Road to 100’: El compromiso de Ariston Group con la sostenibilidad ambiental
En el marco de las nuevas regulaciones europeas sobre envases, Ariston Group se ha comprometido con su plan ‘ROAD TO 100’, cuyo objetivo es reducir significativamente el impacto ambiental de la empresa y promover prácticas sostenibles.
El propósito de este plan es evitar la emisión de 100 millones de toneladas de CO₂ equivalente para 2030, mediante la introducción de tecnologías renovables y eficiencia energética en productos de confort térmico, así como la eliminación de sustancias peligrosas en los envases.
En cuanto a los envases, Ariston Group está definiendo diversas iniciativas para mejorar su reciclabilidad, aumentar la proporción de envases reciclables y plástico reciclado, eliminar los envases más pequeños y minimizar o evitar el uso de plástico siempre que sea posible.
Además, la empresa está fortaleciendo sus operaciones para incorporar prácticas circulares, como la reutilización y el reciclaje, con el fin de reducir aún más los residuos generados a lo largo del ciclo de vida de sus productos.
Estas iniciativas no solo representan un avance en el cumplimiento de regulaciones ambientales más estrictas, sino también un compromiso concreto con un futuro más sostenible, destacando la importancia de integrar la sostenibilidad como un principio rector en las estrategias empresariales.
El objetivo de la Regulación Europea de Envases
La actualización de la Regulación de Envases y Residuos de Envases es un paso crucial hacia un futuro más sostenible.
Con 2025 marcando un año de transición importante, es fundamental que todas las partes interesadas, desde las empresas hasta los consumidores, participen activamente en este cambio.
Las regulaciones no solo buscan proteger el medio ambiente, sino también ofrecer una oportunidad para innovar y orientar el mercado hacia prácticas más sostenibles y responsables.